Desde luego no podrán decir en Bédar que la oposición que ha ejercido Levante Sostenible durante estos años no ha obtenido resultados.
Primero fueron los vertederos, obligando prácticamente al ayuntamiento a que pusiera remedio y los limpiara. Aunque todavía queda mucho que hacer en ese sentido fue un paso importante.
Después denunciamos que la concejala Maria Dolores Castro ocupaba irregularmente el puesto de concejala y trabajadora del ayuntamiento a la vez. Tuvo que dimitir y el ayuntamiento se negó a aclararnos qué puesto de trabajo ocupa esta señora en el ayuntamiento, llegando a afirmar que al ayuntamiento no le costaba ni un euro (comentario que quedó reflejado en un acta de un pleno)lo que nos llevó a preguntar entonces cual era el puesto que ocupaba y quien le pagaba. Por supuesto tampoco nos respondieron, pero sabemos de buena tinta que el ayuntamiento sí que cotiza a la Seguridad Social por ella… ¿Llegaremos a enterarnos algún día de lo que pasa aquí?
Otro tema: las rutas mineras como elemento turístico. Todo el mundo ha podido observar como el ayuntamiento cambiaba de opinión de una manera radical. En cuestión de meses nuestro ayuntamiento pasó de considerar los proyectos para recuperar el pasado minero de Bédar como algo dañino para el pueblo a fomentar la ruta de senderismo, el museo, etc… Donde dije digo digo Diego… Desde luego no tuvieron ningun problema moral para copiar un trabajo que no era suyo.
No menos sorprendente ha sido el cambio igualmente radical de pasar de una política basada en el desarrollo de grandes y monstruosas macrourbanizaciones que llevarían a Bédar a ser una población con 15.000 vecinos a ser firmes defensores del ecoturismo y la sostenibilidad, conceptos que repudiaban tan fervorosamente antes. Otra vez, donde dije digo digo Diego… Suerte que tenían a mano el programa de Levante Sostenible para volver a copiar.
Y hemos llegado hasta ahora, tras participar sin remordimientos en la vergonzosa carrera de inauguraciones, reinauguraciones y presentaciones varias previa a las elecciones que ha azotado a España, el ayuntamiento se esfuerza por hacer ahora en dos meses lo que no han querido o sabido hacer en 4 años. La última es arreglar la carretera de Serena. Se han dado cuenta (a lo mejor porque yo le he repetido numerosas veces) que es una locura construir el centro de interpretación en Serena, donde los autobuses de turistas no pueden llegar… Les ha costado, sí, pero se han dado cuenta y están arreglando la carretera, esa carretera que no podían arreglar porque, siempre según nuestro ayuntamiento, era cosa de la Junta y ellos no podían hacer nada (ahora parece que sí.)
Ahora solo falta una cosa, y lo digo para ver si acaban dándose cuenta de una vez. Aunque los autobuses puedan llegar a Serena por la carretera ¿me puede decir alguien dónde van a aparcar? ¿en el barranco?
Por cierto, mis felicitaciones por una de las fantásticas inauguraciones de última hora: el embellecimiento de la plaza del Ayuntamiento. En época de austeridad nos dedicamos a poner arcos y otras zarandajas, tan bonitas como inútiles. Un buen colofón para un grupo municipal que se ha mostrado siempre opaco y turbio y que en ningún momento ha sabido gestionar correctamente un ayuntamiento.