La única mina que ha sido completamente afectada por el incendio de agosto ha sido la de Pobreza. El hecho de que se quemara toda la vegetación ha dejado todas las estructuras de la antigua mina limpias y ha sido una oportunidad única para observar y fotografiar con detenemiento todas los elementos y sus relaciones. También ha sido una oportunidad de comprobar cómo sería si las instalaciones de la mina estuvieran limpias de cara a los visitantes.
En Pobreza se encuentra el único horno de calcinación de carbonatos de hierro de las minas de Bédar (de plomo hay unos cuantos), y aprovechando que están limpias. Por lo general la frondosa vegetación impedía observar bien todos los elementos de la instalación del horno, pero una vez limpio podemos observar bien la superfice de carga superior, las escaleras de acceso a ésta plataforma. El horno se encuentra entre las dos entradas de las galerías de la trancada nº3 de la mina, en la fotografía siguiente he indicado las dos entradas, la de la izquierda se bifurca al poco de la entrada dirigiéndose hacia San Carlos y San Ricardo. La obertura de la derecha, a un nivel superior, se bifurca también dirigiéndose a San Carlos y el pozo Maestro.
En rojo se indican la entrada de las galerías de la trancada y en amarillo la dirección de las galerías. En verde se indica la presencia de una tobera instalada en la entrada de una de las galerías que servía para alimentar el horno y, de paso, como medio para renovar el aire en las galerías.
En la fotografía superior, vemos la entrada de la tobera desde el interior de la galería.
Los restos del horno están bien conservados, se trataba de un horno de pequeñas dimensiones, puede que para comprobar el rendimiento tras alcanzar una capa de carbonatos de hierro.
LA MINA POBREZA
Con una extensión media de unos 400-500 m por 300 m de anchura y hasta 12 y 14 m de espesor, se trata del mayor criadero de mineral de hierro de la zona. Situada en la ladera sur del barranco del Servalico, experimentaba un buzamiento en dirección SE-NO.
Propiedad de la Compañía de Águilas, fue reconocida mediante una serie de pozos paralelos al barranco: San Adolfo, San Manuel, San Eduardo, San Francisco, San Claudio, Esperanza y San Pedro; también se efectuó una fila de pozos más al S entre los que se encuentran el pozo Almendros, el pozo del Camino y el de San Juan.
Plano de la mina Pobreza (Memorias del Instituto Geológico de España, A. de Sierra, Hierros de Almería y Granada.)
El criadero se atacó mediante las galerías de San José al O, San Diego y Santa Bárbara, que desciende unos 30 m formando en su base el piso San Carlos. Más al E se sitúa el socavón San Ricardo (formando la trancada nº 3 junto al socavón de Santa Bárbara) que sigue en dirección SE unos 95 m hasta el pozo San Ricardo, que con 70 metros de profundidad corta en su base una galería que comunica con el San Gabriel a unos 105 m más al E.
Debido al buzamiento SE, las galerías iniciales a unos 300 m, a unos 80-100 m quedan en el techo del criadero y por pozos interiores se forman nuevos pisos a 291-292 m, los de San Fernando, San Jorge y San Teodoro, otros a 284 m como San Juan y finalmente al S y a unos 200 m de la boca de la Galería San Francisco, se llega, con el pozo San Antonio y la trancada del pozo San Bonifacio, hasta la cota de 264 m.
La producción se extraía por medio deL pozo Maestro, situado en la galería de San Diego (cerca de los pozos San Cristóbal y San Martín) y por los socavones principales llevando el mineral al depósito del cable aéreo situado en la margen sur del barranco del Servalico. En el mismo punto se encuentran las oficinas, casa fragua, establo para caballerizas de transporte de vagonetas, etc. a unos 307 m de altitud.
Cuando se produjo la fusión en la Unión Bedareña se procedió a conectar esta mina con el cercano ramal de ferrocarril de Santa Catalina, que sería mucho más efectivo que no el ramal de cable. Para ello se instaló un plano inclinado con motor desde el vaciadero junto a la entrada de la galería de San José que elevaba el mineral hasta un cargadero-depósito con 8 compuertas junto al trazado de la vía del ferrocarril de Santa Catalina, desde el que se cargaba directamente sobre los vagones del ferrocarril.