Son muchas las fotos del minero de la plaza de la Cruz, pero ninguna en la que se pueda ver lo que el minero mira.
Cuando veo esta fotografía me vienen dos pensamientos a la cabeza:
– El primero y automático: ¡Que bonito que es mi pueblo!
– El segundo: ¿Cómo es posible que cojan tantos coches en tan poco espacio? Cualquiera diría que no hay parking a la entrada del pueblo.
Ja ja ja