El misterioso final de la locomotora «Chimpún» de Garrucha

Hoy hablaremos de una de las viejas locomotoras del ferrocarril Bédar-Garrucha, injustamente olvidada: la «Chimpún». Se trataba una pequeña locomotora de gasolina para maniobras adquirida tardíamente por la compañía minera, pocos años antes de la paralización de las labores, pero que tuvo un papel importante en la construcción del puerto de Garrucha durante los difíciles años de preguerra y durante la guerra civil.

Representación artística de la «Chimpún» en las obras de construcción del puerto de Garrucha elaborada a partir de una de las dos fotografías conocidas en las que aparece esta locomotora (abajo). Probablemente estaría pintada en verde oscuro (Deutzgrün), pues era el color corporativo característico de Deutz en esa época y no hay constancia de que fuera pintada a su llegada a Garrucha.

Es posible que recibiera algún nombre de bautizo, aunque no se hace referencia alguna en la documentación conservada. Según testimonios orales (Trenes, cables y minas de Almería, 2000) parece que se la conocía popularmente como la «Chimpún», a causa del característico ruido de su motor a gasolina.

En 1922, la Unión Bedareña compró un tractor diésel Deutz con el número de serie 4224 con motor C XIV F de 10 caballos de potencia para las maniobras en la estación junto a Garrucha. Esta compra formó parte de un gran esfuerzo de inversión de capital, tras la Primera Guerra Mundial, que pretendía modernizar las instalaciones, con un ambicioso plan de nuevas infraestructuras y material. Sin embargo, y a pesar del dinero invertido, los trabajos se demoraron demasiado y el mercado internacional no permitió que la actividad se mantuviera, paralizándose los trabajos en 1923.

Anuncio de locomotoras de combustión con motor Otto-Deutz de 1921. La ilustración muestra una locomotora del mismo tipo que la adquirida por la Unión Bedareña.

Pero no acabó aquí la vida útil de esta locomotora. En 1933 fue arrendada para el servicio en una desconocida línea de ferrocarril de transporte de yesos de 2,8 km de longitud, para unas canteras pertenecientes a los Berruezo cercanas a Garrucha sobre la que pronto publicaremos un artículo dando todos los detalles. Posteriormente, fue adquirida por la empresa constructora del puerto de Garrucha por 6.400 pesetas, siendo utilizada en las obras de construcción del puerto. Las dos únicas fotografías conocidas (hasta el momento) que nos muestran esta locomotora lo hacen a cierta distancia, lo que nos impide apreciar los detalles, pero parece que fue intensamente utilizada para el acarreo de piedras hacia los espigones desde la cantera junto a Garrucha.

Marca de fábrica de la portada de la carpeta que sobre esta locomotora se guardaba en las oficinas de la Unión Bedareña, aunque no contenía documento alguno, probablemente por haberse entregado tras la compra por la empresa constructora del puerto.

Le perdemos la pista durante la guerra civil , aunque es de suponer que se utilizó durante todo el conflicto en dichas obras del puerto, ya que los trabajos se continuaron todo el tiempo, ya que en los documentos de la Unión Bedareña se registra la venta de los repuestos que disponían para la misma al nuevo propietario. No sabemos si la «Chimpún» fue desguazada o si el nuevo propietario le buscó otro destino, pero en todo caso desaparece de la historia conocida. Al igual que pasa con las «gemelas» (las dos locomotoras 020T del ferrocarril Bédar-Garrucha), su final sigue siendo un misterio.

Para más información:

Un año de publicaciones

¡Gracias a todos los que han adquirido nuestros libros y guías! Todos están disponibles en Amazon. Un nuevo proyectos está en preparación, les mantendremos informados.

El misterioso final de la locomotora «Chimpún» de Garrucha

Hoy hablaremos de una de las viejas locomotoras del ferrocarril Bédar-Garrucha, injustamente olvidada: la «Chimpún». Se trataba una pequeña locomotora de gasolina para maniobras adquirida tardíamente por la compañía minera, pocos años antes de la paralización de las labores, pero que tuvo un papel importante en la construcción del puerto de Garrucha durante los difíciles años de preguerra y durante la guerra civil.

Una de las dos fotografías en las que se ve la «Chimpún» en las obras de construcción del puerto de Garrucha.

Es posible que recibiera algún nombre de bautizo, aunque no se hace referencia alguna en la documentación conservada. Según testimonios orales (Trenes, cables y minas de Almería, 2000) parece que se la conocía popularmente como la «Chimpún», a causa del característico ruido de su motor a gasolina.

En 1922, la Unión Bedareña compró un tractor diésel Deutz con el número de serie 4224 con motor C XIV F de 10 caballos de potencia para las maniobras en la estación junto a Garrucha. Esta compra formó parte de un gran esfuerzo de inversión de capital, tras la Primera Guerra Mundial, que pretendía modernizar las instalaciones, con un ambicioso plan de nuevas infraestructuras y material. Sin embargo, y a pesar del dinero invertido, los trabajos se demoraron demasiado y el mercado internacional no permitió que la actividad se mantuviera, paralizándose los trabajos en 1923.

Anuncio de locomotoras de combustión con motor Otto-Deutz de 1921. La ilustración muestra una locomotora del mismo tipo que la adquirida por la Unión Bedareña.

Pero no acabó aquí la vida útil de esta locomotora. En 1933 fue arrendada para el servicio en una desconocida línea de ferrocarril de transporte de yesos de 2,8 km de longitud, para unas canteras pertenecientes a los Berruezo cercanas a Garrucha sobre la que pronto publicaremos un artículo dando todos los detalles. Posteriormente, fue adquirida por la empresa constructora del puerto de Garrucha por 6.400 pesetas, siendo utilizada en las obras de construcción del puerto. Las dos únicas fotografías conocidas (hasta el momento) que nos muestran esta locomotora lo hacen a cierta distancia, lo que nos impide apreciar los detalles, pero parece que fue intensamente utilizada para el acarreo de piedras hacia los espigones desde la cantera junto a Garrucha.

Marca de fábrica de la portada de la carpeta que sobre esta locomotora se guardaba en las oficinas de la Unión Bedareña, aunque no contenía documento alguno, probablemente por haberse entregado tras la compra por la empresa constructora del puerto.

Le perdemos la pista durante la guerra civil , aunque es de suponer que se utilizó durante todo el conflicto en dichas obras del puerto, ya que los trabajos se continuaron todo el tiempo, ya que en los documentos de la Unión Bedareña se registra la venta de los repuestos que disponían para la misma al nuevo propietario. No sabemos si la «Chimpún» fue desguazada o si el nuevo propietario le buscó otro destino, pero en todo caso desaparece de la historia conocida. Al igual que pasa con las «gemelas» (las dos locomotoras 020T del ferrocarril Bédar-Garrucha), su final sigue siendo un misterio.

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El Pinar de Bédar: objetos curiosos del mayor archivo privado conocido referente a la minería histórica.

En primer lugar querríamos agradecer a todos los que ya han adquirido el libro sobre El Pinar, ya sea en su versión en españolo o en inglés. Para los que dudan, vamos a comentar alguna de las novedades incluidas en esta obra, especialmente para los aficionados a la historia y patrimonio del Levante almeriense.

Candil de piquera de época califal con decoraciones epigráficas.

Es conocido lo difícil que es acceder, con fines de investigación, a la documentación y objetos de época de las empresas mineras del XIX y principios del XX, no digamos ya fotografías. Por lo general, lo poco que hay es buscado con avidez y atesorado por coleccionistas privados, en un lucrativo mercado de libros, periódicos, planos de época, minerales de colecciones antiguas, acciones mineras y las siempre codiciadas fotografías de época. De esta manera, los descubrimientos documentales rápidamente se fragmentan y distribuyen por los diferentes mercados con destino a coleccionistas, cuyo único objetivo es adquirir una nueva pieza para sus respectivas colecciones, sin importarles su contexto o valor para los investigadores.

Nos queda, casi en exclusiva, los archivos públicos, en especial el Archivo Municipal de Vera y el Archivo Histórico Provincial de Almería, además de las diferentes hemerotecas públicas nacionales. Estos archivos nos permiten suplir en parte esta carencia, pero echamos mucho de menos los documentos de primera mano de las empresas, que son los que suelen contener dar más pistas sobre las motivaciones y los por qués de los acontecimientos investigados.

Dos de los objetos procedentes del hospital minero de El Pinar. Se trata de un inhalador de cloroformo en su estuche, utilizado para anestesias (izquierda) y una Pipe of Peace de Sir Hiram Maxim (derecha), un inhalador para tratar afecciones bronquiales ideado por el inventor de la famosa metralleta que lleva su nombre.

Al enfrentar el estudio de la minería de El Pinar nos encontramos tan solo con una serie de tradiciones orales de difícil comprobación y, eso sí, gran cantidad de documentación en los referidos archivos. Esto nos permitió perfilar su historia con algo más de precisión, pero quedaban muchas preguntas en el aire y enormes lagunas sober las que solo podíamos emitir algunas hipótesis.

Esto cambió con el descubrimiento de los archivos familiares de Dietrichson y Thorkildssen en Noruega (gracias a nuestra amiga Lise Hansen). Este es un momento clave que marca un punto de inflexión claro en nuestra forma de investigar, atisbando la dimensión internacional de lo que ocurrió en nuestra tierra, buscando y localizando documentación en lugares tan distantes como Alemania, Inglaterra, Francia y EEUU. Es evidente que, además de suponer un avance significativo en nuestras pesquisas, este nuevo enfoque nos permitió expandir nuestras investigaciones más alla de las fronteras de la provincia, escapando al tradicional localismo de la investigación histórica almeriense y de sus dogmas históricos establecidos, ya un poco manidos y faltos de actualización. Además pudimos liberarnos de la dependencia asfixiante de los pocos archivos locales, privados o no, existentes.

El nuevo flujo de datos, documentos y fotografías nos permitió elaborar una primera obra de síntesis que seguramente muchos conocerán, se trata del libro «MINASCABLES, FERROCARRILES, FUNDICIONES Y EMBARQUE DE MINERALES», publicado en 2021. En esta obra volcamos toda la información y documentación recopilada hasta el momento, lo que la ha convertido en una referencia para la minería en el Levante.

Báscula de precisión del laboratorio de El Pinar.

Pero a pesar de todo, no estaría completo sin la documentación de primera mano, la de las propias empresas que gestionaron la minería en El Pinar de Bédar. Y finalmente, ya sea a causa de nuestra constancia o por algún tipo de milagro, llegó finalmente. Así llegaron accedimos a los archivos de la 2ª división de la Compañía de Águilas y de la Unión Bedareña, con domicilio social en El Pinar de Bédar primero y en Vera después. Siguendo la buena racha, también localizamos los de la empresa TRAMISA, que siguieron los trabajos de las primeras

No entraremos en cómo se descubrió este completo archivo de una empresa histórica, que creemos único, lo importante es que pasamos de contar, con suerte, con una carta sobre un tema específico a tener que seleccionar las cartas más relevantes. En efecto, con más de 5.000 cartas, muchas personales, unos 300 planos, objetos topográficos y administrativos, libros, cuadernos de notas, folletos de proveedores. Por primera vez nos vimos desbordados de documentación, lo que supuso un ardúo trabajo de identificación, clasificación y catalogación de la documentación y objetos encontrados, lo que llevó un trabajo continuado de 4 meses.

En especial, esta documentación venía a cubrir el muy desconocido periodo minero entre 1910 y el final de la guerra civil española, por lo que a la historia se se añadía el difícil periodo bélico, con una cantidad asombrosa de documentación que haría las delicias de cualquier investigador de ese periodo, incluyendo el espinoso asunto del contrabando de wolframio por parte de los alemanes durante la segunda guerra mundial.

Este reloj de pared es el original que estuvo instalado en la fachada de las Oficinas centrales de la Compañía minera en El Pinar de Bédar.

La obra sobre el Pinar de Bédar que hemos publicado recientemente incluye mucha información procedente de este archivo. Es precisamente esa información la que nos ha permitido completar y actualizar la información que ya pubicamos en nuestra anterior obra. Por motivos obvios, no está incluida toda la documentación, como solemos hacer, pero sí la más relevante y los objetos más curiosos.

Entre algunas de las curiosidades encontramos los recibos de avance de fondos para los últimos partidarios de las minas de plomo en 1926; unos rarísimos vales para bienes de consumo de la guerra civil española, la tercerola rolling block de calibre 43 de uno de los guardias jurados de El Pinar, una de las máquinas de escribir originales Remington de las oficinas o incluso el antiguo reloj de pared, objetos de la iglesia y del hospital del poblado minero, etc.

NOVEDAD- El Pinar de Bédar: conoce como nunca antes este antiguo poblado minero del Levante

Hoy anunciamos la publicación del nuevo libro sobre la historia de El Pinar de Bédar, un importante centro minero del Levante almeriense durante la segunda mitad del siglo XIX y la primera del XX, base de operaciones de la todopoderosa Compañía de Águilas y, posteriormente, la Unión Bedareña. El Pinar se encontraba en el trayecto del cable aéreo de transporte de minerales de Bédar a Garrucha, donde estaba ubicada la principal planta motriz, siendo en su época el segundo cable más largo del mundo y un hito tecnológico en el momento de su construcción, llegando a inspirar proyectos hasta en Estados Unidos. También contó con el lavadero mecanizado de minerales de plomo de más capacidad del mundo en esos momentos, incluso más que el de las minas del Harz superior en Alemania.

Sus minas de plomo y cobre, explotadas desde la antigüedad, fueron de gran importancia para su matriz, Bédar, además de un ejemplo representativo de las diferentes fases mineras en el sureste español, desde fundiciones de plomo, desde las grandes compañías mineras con instalaciones mecanizadas de tecnología puntera hasta los sistemas más artesanales llevados a cabo por mineros locales, en una involución tecnológica muy similar a la experimentada en la minería de la sierra de Cartagena.

El libro, que cuenta con una versión en inglés preparada por Andrew Devey, se inició como el tercer volumen de la trilogía de guías que habíamos planeado, después de la ruta de la minería de Bédar y de la ruta urbana-ruta del agua. Sin embargo, debido a la gran cantidad de hallazgos que hemos llevado a cabo desde que publicamos el libro «Minas, cables , trenes, fundiciones y transporte», la guía fue incrementándose hasta convertirse en una completa revisión y ampliación de la historia de este interesante poblado minero desde sus más antiguos orígenes hasta crisis de 2008 y la urbanización actual.

Muchas son las historias que se recogen en este volumen, desde el día a día de un minero hasta el duro trabajo de los partidarios locales de las minas a finales de los años 1920; sobre el desmantelamiento del viejo poblado en la década de 1930; de los motines de la población local contra los propietarios durante el siglo XIX; de las peleas entre sociedades mineras, a veces a escopetazos; de cómo se salvó la iglesia durante la guerra civil; de sus espectaculares fiestas; de sus instalaciones, de su funcionamiento, y hasta de la resurgencia del poblado actual a manos de ciudadanos ingleses. Como no, se incluye la ruta minera que está implementándose actualmente en este bonito paraje.

Como es habitual en nuestras publicaciones, no hemos reparado en limitaciones a la hora de aportar todo el material disponible (nosotros no nos guardamos nada en el tintero), presentado en un formato manejable y de tapa dura, para más comodidad en caso de utilizarse durante una visita al terreno. La obra consta de 222 páginas y más de 200 ilustraciones (fotografías, muchas inéditas, planos, documentos, representaciones artísticas, etc.). El libro se puede adquirir por AMAZON al precio de 20 euros, tanto en su versión española como en la inglesa (es suficiente con teclear «Pinar de Bédar» en el buscador de Amazon o clicar sobre las imágenes de las portadas en este post). El lector podrá sumergirse en la apasionante historia de este poblado, una muestra a escala reducida de lo que fue toda la minería del sureste de España entre los siglos XIX y XX.

Publicaciones anteriores de venta en AMAZON:

La nueva guía de las rutas de Bédar

Tras publicar en febrero la guía de la ruta minera, hoy toca presentar la de las rutas urbana y del agua de Bédar, dos cortas pero intensas rutas, cargadas de historia y de patrimonio.

Establecidas desde hace ya varios años, las rutas de Bédar permiten conocer un pueblo que guarda mucho de la esencia de su pasado hispano musulmán, y en el que se preserva el sitema tradicional de tandas arábigas, con un patrimonio con elementos únicos. Las rutas son fáciles de efectuar y tremendamente refrescantes incluso en los días más cálidos, con la posibilidad de disfrutar del excelente agua que surge de los manantiales de la sierra. Por si fuera poco, el pasado minero se añade con elementos únicos como una vagoneta aérea original preservada, la única en la provincia de Almería, y una mina de película, donde se rodaron escenas de la Isla del tesoro de de 1972, con el mismísimo Orson Welles como protagonista.

Para aprovechar al máximo esta experiencia, y en caso de no poder disfrutar de una visita guiada, presentamos esta pequeña guía, de unas 70 páginas y muy ilustrada (más de sesenta fotografías, planos y dibujos). Incluye planos guía ampliados y mejorados de la ruta urbana y de la ruta del agua; una completa sección de historia, con la historia antigua, hipótesis sobre la fundación y el origen del nombre de la localidad; explicaciones detalladas sobre las pinturas califales de la Balsa Alta (aunque todavía no están preparadas para su visita, pero todo llegará); una sección para comprender el sistema de riego y el significado de los antiguos topónimos de las balsas (Cahara, Begira, Alain…); todo lo que se necesita saber sobre los castillos, iglesias, monumentos y ermitas del pueblo, incluida la posición de la antigua mezquita de la población; información sobre las minas cercanas al pueblo y lo que es aún visitable, y, finalmente, reproducciones de muchos de los restos arqueológicos (monedas, cerámica, pesas, etc.) documentados durante décadas por nuestros investigadores, que ayudan a comprender y a ilustrar la visita. La guía está ya disponible en Amazon, muchos siglos de historia concentrados y todo por el módico precio de 10 euros.

Finaliza el curso de campo para los alumnos de la Universidad Nancy en Bédar. Reapertura de la Ruta de las Minas.

Le cours de terrain des étudiants du département Sciences de la Terre de la Faculté des Sciences et Technologies de l’Université de Lorraine à Nancy , qui se déroule depuis deux semaines à différents endroits du Levant d’Almeria, est sur le point de finir. Malgré la pluie, nous leur souhaitons un bon retour en espérant que le séjour aura été très profitable.

Cette nouvelle coïncide avec la réouverture des routes de Bédar, car les photos de deux routes ont été publiés ce week-end ont été publiés sur Facebook, l’une effectuée par la Route des Mines, une visite organisée par la Députation d’Almeria et une autre par l’Association « Correcaminos » de Turre. C’est aussi aujourd’hui quand le Président de la Députation sera reçu à Bédar, à 12h30. La Route des Mines était fermée à cause des travaux d’amélioration en cours, mais aussi à cause des dégâts produits par les pluies récentes. Nous sommes heureux de sa réouverture et des améliorations apportées, qui font plus sûr le passage par la route Vulcano, rendant la visite plus spectaculaire si possible.

Está a punto de finalizar el curso de campo para los alumnos de geología de la Universidad de Nancy, que llevan ya dos semanas desarrollándose en varios puntos del Levante. A pesar de la lluvia, esperamos que la estancia haya sido muy provechosa y les emplazamos para el año siguiente. Esta noticia coincide con la reapertura de las rutas de Bédar, pues este fin de semana se han publicado en Facebook dos rutas, una efectuada por la ruta de las minas organizada por la Diputación de Almería y otra por la ruta del agua, por parte de la Asociación de los Correcaminos de Turre. Precisamente hoy se recibe en Bédar la visita del Presidente de la Diputación, a las 12:30 horas.

La Ruta de la Minería estaba cerrada a causa de mejoras en su trazado gracias a una subvención recibida por la Diputación de Almería, además de desperfectos sufridos por las recientes lluvias, igual que ha pasado con la Ruta del Agua, cerrada a causa de las precipitaciones. Nos alegramos de su reapertura y de las mejoras en la ruta de la minería, que hacen más seguro el paso por la vía Vulcano, haciendo la visita más espectacular si cabe.

Fotografías superior e inferior: visita organizada por la Diputación de Almería por la Ruta de la Minería de Bédar en la que se ven parte de las mejoras realizadas.

La recientemente publicada guía para la Ruta de las minas en Bédar. Se puede adquirir por Amazon.

El día de Andalucía y la minería

Llega un nuevo 28 de febrero, día de Andalucía, mientras vemos la llegada de nuevo de los estudiantes franceses de geología de la Universidad de Nancy en su cita anual (y ya van 11 si no contamos el maldito año de 2020). Haciendo un rápido balance de estos más de 10 años de difusión y promoción de soluciones turísticas centradas, especialmente en el abundante patrimonio minero existente en la sierra de Bédar, y no podemos menos que estar satisfechos.

Un día, quizás, la vía verde Bédar-Garrucha se habilite para el turismo, como lo está siendo el antiguo trazado del ferrocarril entre Lucainena y Agua Amarga, como podemos ver en la fotografía superior, con la reconstrucción de uno de los puentes de la línea. Pero para que eso ocurra hace falta una cohesión y voluntad que, de momento, los organismos públicos locales están lejos de alcanzar.

A la hora en la que redactamos estas líneas, el alcalde de Bédar debe estar entregando el bien merecido galardón como persona distinguida a uno de los voluntarios que colaboró en la recuperación de la vagoneta aérea minera sistema Bleichert procedente del 2º cable (Serena-Los Gallardos) que se exhibe a la entrada el pueblo. Desde el 13 de febrero del presente mes, y gracias a una generosa subvención procedente de la Diputación, se está renovando la vía de la minería de Bédar, que cada vez gana más en prestigio a causa de la espectacularidad y su alta carga patrimonial.

En una de esas curiosas coincidencias, el 11 de febrero también se publicó una guía sobre las rutas mineras de Bédar y Los Gallardos que, aunque no es oficial, ha sido elaborada por el promotor cuyas investigaciones las ha hecho posibles. En este sentido, queremos agradecer la asociación APAMILE por su publicidad y a los más de 32.000 internautas que ya han visto el video promocional y especialmente a los centenares que lo han compartido. Recordamos que la guía está a la venta por Amazon, es suficiente con teclear «guía minera Bédar» para poder localizarla.

Nueva guía para las rutas mineras de Bédar y Los Gallardos

Desde el 11 de febrero está a la venta la nueva guía para las rutas mineras de Bédar y Los Gallardos. Se trata de unas rutas muy transitadas que transcurren por algunos de los principales núcleos mineros existentes en la sierra de Bédar.

Animación con inteligencia artificial (MyHeritage) de una fotografía de 1903 de Tres Amigos, la primera en la que vemos la locomotora y la tolva de Tres Amigos en su configuración inicial.

Desde su inauguración oficiosa en 2008 la ruta no ha sido puesta al día y, con el tiempo, las explicaciones que dan los guías (cuando hay guías y cuando las dan) están obsoletas y son muy incompletas. Pero la investigación ha avanzado mucho y, para volver a ponerla al día, el autor se ha decidido a publicar este pequeño libro-guía de 132 páginas, profusamente ilustrado con más de 180 fotografías, dibujos y planos.

Hablamos, sin duda, de la persona que mejor las conoce estas rutas. Fue quien realizó el diseño de la ruta minera de Bédar y que además indagó en la historia de todos los elementos que se pueden ver, de manera que el visitante no solo puede observar una gran variedad de elementos del patrimonio minero sino que además puede comprenderlos y conocer su historia como muy pocas rutas del mismo tipo permiten hoy en día.

Interior de la tolva-depósito de Tres Amigos. La tolva inicial fue construida en 1896 por la compañía del ferrocarril y en su ampliación de 1919 se utilizó una mezcla de cemento Portland y arena, una fórmula especificada por el ingeniero bedarense Francisco Nieto. La ampliación se hizo siguiendo los planos elaborados en La Maquinista, completando la trinchera inicial con una bóveda, configurando así un túnel que permitía cargar en el interior y, además por el exterior, haciéndola más versátil y permitiendo una carga mucho más rápida que con la única compuerta inicial.

Como ya saben los que la han visitado, estas rutas incluyen estrechos senderos junto a barrancos, túneles, el paso por trincheras, la visita a tolvas monumentales y todo tipo de infraestructura minera, incluidos ferrocarriles y cables aéreos de transporte. Aunque la ruta de por sí es muy atractiva visualmente, es una experiencia muy diferente cuando conocemos la historia de todos esos elementos patrimoniales y aún mejor si, como el autor hace, nos explican las curiosidades y secretos que esconde, que no son pocos.

¿Sabe usted dónde tuvo lugar el peor accidente minero en la sierra de Bédar? ¿sabe lo que significan las cruces grabadas a la entrada del túnel del Servalico? ¿sabe en qué consistía el trabajo de un galguero y los riesgos que corría? ¿sabía usted que la tolva de Tres Amigos actual no era antes como la vemos hoy? ¿sabe cómo acabaron las locomotoras gemelas o la diésel del ferrocarril de Bédar a Garrucha?

Y no se queda ahí el interés de esta obra. El autor nos avanza importantes novedades, fruto de sus más de 20 años de investigaciones sobre la minería y metalurgia levantina, que vienen a completar muchas incógnitas y lagunas de la historia, que afectan a muchos de los restos que se pueden visitar en estas rutas. Entre otros, el autor desvela la identidad de los constructores de las tolvas de la trinchera Villalta, la tolva-depósito de Tres Amigos, las tolvas de Vulcano y la tolva Esperanza, además de las fechas y hasta el coste que tuvieron tales trabajos. También se desvelan los misterios referentes a la renombrada vía Vulcano, sus orígenes y evolución en el tiempo, con aclaradores planos y nueva información.

Impresionante vista del pozo P captada con una cámara con cabria por Antonio González Jódar.

Y no se queda ahí el interés de esta obra. En sus más de 20 años de investigación sobre la minería levantina, el autor nos avanza importantes novedades, fruto de sus investigaciones, que vienen a completar muchas incógnitas y lagunas de la historia, lo que incluye a muchos de los restos que se pueden visitar. Entre otros, el autor desvela la identidad de los constructores de las tolvas de la trinchera Villalta, la tolva-depósito de Tres Amigos, las tolvas de Pobreza, Vulcano y la de la mina Esperanza, además de las fechas y hasta el coste que tuvieron los trabajos. También se desvelan los misterios referentes a la renombrada vía Vulcano, sus orígenes y evolución en el tiempo, con aclaradores planos y nueva información. Entre todo, no podemos dejar de destacar una fantástica panorámica de Tres Amigos en 1903, la primera fotografía conocida de la Estación de Tres Amigos de la sociedad de Víctor Chávarril. En definitiva, un libro que todo buen aficionado a estas rutas, y a la historia y el patrimonio minero en general, no debe perderse.

Para ilustrar sus explicaciones, el autor incluye cartas y planos originales y un interesantísimo catálogo visual de objetos encontrados localizados durante las exploraciones sobre el terreno y las visitas a familiares de ingenieros y mineros. Este catálogo incluye, entre otros, un curiosísimo magnetómetro sueco de Thalen-Tiberg de 1901 con el número de serie 161, de los que creemos que se conservan muy pocos ejemplares.

La antigua vía del ferrocarril Bédar-Garrucha pasando junto a los restos de la caseta de guardavías n.º 1. cerca del Trinchera Villalta.

Ya en la portada vemos un ejemplo de hasta donde ha llegado la investigación, pues nos muestra la plaquita con filigrana del álbum que los trabajadores de la Compañía de Águilas regalaron al director de la sociedad minera en 1891 cuando dejó el cargo para volver a su país, Noruega. El álbum, que contiene fotografías de gran valor histórico, acabó en una rama de la familia que emigró a Estados Unidos, donde fue localizado gracias a una increíble combinación de casualidades. El resultado es un pequeño libro, de fácil lectura y muy ilustrado, que está en venta en Amazon desde el día por el módico precio de unos 14 euros (en función del país y tasas varias).

Visitantes en la ruta de prueba de 2009, en la que antes de empezar el recorrido se visitó la tolva-embudo y los restos de la mina Unión de Tres Amigos.

Para acabar, nos enteramos de que hace poco se han iniciado el pasado día 13 unas obras de mantenimiento y reparación de la ruta minera de Bédar en su tramo entre San Manuel y el puente sobre el barranco de Hoya. Tenemos que decir que la casi coincidencia con la publicación de estra guía no tiene absolutamente nada que ver con el inicio de estas obras, tan solo es una muy curiosa casualidad. En todo caso, nos alegramos de que se realicen estos trabajos porque algunos tramos de la vía vulcano y el plano inclinado que conecta con la vía Esperanza necesitaban algunas mejoras y unos paneles informativos vendrían muy bien.

En cuanto a la ruta minera de Los Gallardos, hemos de decir que está muy cuidada y con buenos paneles informativos. El derrumbe que existía en uno de los terraplenes cerca de la primera caseta de guardavías ha sido correctamente reparado y tan solo esperamos que se pueda pueda poner prontamente a punto el paso por el puente de la Cueva de la Barrilla que, en el día de hoy, está impracticable y obliga a descender y subir por el barranco.

La memoria viva de la historia de Bédar: la fotografías históricas de Bédar en movimiento

Como siempre, estamos atentos a las últimas novedades en reparación y animación de fotografías históricas que ofrece la página myHeritage con los últimos avances de la IA. Ya presentamos varias fotografías animase de reconocidos ingenieros y personajes relacionados con la historia de Bédar y hoy presentamos la última novedad: LiveMemory (https://www.myheritage.com/livememory/).

Las primeras pruebas dan resultados realmente espectaculares, y aunque no son perfectas, son una nueva forma de mostrar nuestra historia. Veamos algunos ejemplos y juzguen ustedes mismos:

Un clásico de la historia de Bédar, la locomotora n.º 1 del ferrocarril Bédar-Garrucha hacia 1903 en la estación de Garrucha… es impresionante ver como la chimenea vuelve escupir humo.
El motor del cable aéreo de la mina Pobreza de Bédar vuelve a girar de nuevo…
Volver a ver al perrito pasearse ante el tren a punto de partir de la estación de Garrucha no tiene precio.
Los ingenieros Wilhelm Dietrichson y Ferdinand Putz conversando entre ellos y rodeados de otros ingenieros en las instalaciones de la Compañía de Águilas en El Pinar de Bédar en 1888. Sin palabras.
Mineros preparándose para una histórica foto en las instalaciones de las minas en Serena, rodeando a su director, Juan Pié y Allué hacia 1893.